Desde el nodo de Madrid de la Px1NME organizamos una visita guiada a la rehabilitación energética de edificios realizada en el Poblado Dirigido de Orcasitas.
Tras conocer todos los detalles del desarrollo del proyecto, hemos recogido una serie de propuestas que consideramos necesarias para mejorar los procesos de rehabilitación energética de edificios.
El lunes 3 de febrero el nodo de Madrid de la Px1NME organizamos la visita a la rehabilitación energética de edificios realizada en el Poblado Dirigido de Orcasitas. Manuela Navarro de la AAVV Guetaria nos guió en el paseo que hicimos por el barrio explicandonos todo el proceso que habían seguido para rehabilitar los edificios.
Para entender un poco mejor la historia del Poblado Dirigido de Orcasitas nos tenemos que ir a sus orígenes en los años 50. Las construcciones que se hicieron tenían muy mala calidad y deficiencias en la cimentación, por lo que el barrio completo tuvo que ser demolido y construido de nuevo en los años 80. El nuevo barrio tenía ciertas mejoras como la instalación de ascensores y calefacción pero, a cambio, las viviendas tenían menos metros cuadrados y su precio había subido.
En 2014 comenzaron los problemas en las edificaciones nuevas, por desprendimientos de los antepechos de fachada. Cada bloque tiene un mínimo de 44 antepechos por lo que la situación es extremadamente peligrosa para la seguridad. El barrio se movilizó pidiendo ayuda a las administraciones. En primer lugar al IVIMA (pues habían sido los promotores del barrio) y posteriormente al Ayuntamiento de Madrid y a la Junta Municipal del Distrito Usera. También se pidió apoyo a organizaciones como el Colegio de Arquitectos de Madrid o la Fundación Annie Johansen y se convocó un concurso de ideas para elegir la solución más adecuada.
Lo que empezó siendo un problema relacionado con el estado de conservación de los edificios se fue convirtiendo en una posibilidad de mejorar, además, las condiciones de eficiencia energética, aprovechando que las ayudas del Plan MadRe estaban dotadas con una subvención del 60% del Presupuesto de Ejecución Material (PEM) si se actuaba energéticamente sobre la envolvente de los edificios, frente al 40% del PEM si sólo se actuaba a nivel de reparación de los antepechos.
La rehabilitación del barrio no ha terminado. En este momento, la gran mayoría de los edificios han solicitado ayudas y están esperando su concesión para comenzar las obras. La necesidad de sensibilizar a las administraciones de la problemática que tiene el barrio hace que se esté desarrollando una gran labor de difusión en foros como el VI Congreso De Edificios De Energía Casi Nula donde se explicó detalladamente todo el proceso que habían seguido a través de la ponencia “Reconvirtiendo el barrio Poblado Dirigido de Orcasitas. De peligrosos desprendimientos de antepechos de 1.200 kg a energía casi nula y máximo confort”
Mejoras conseguidas con la intervención
Cada edificio está gestionando de forma autónoma su rehabilitación apoyándose en la experiencia de las comunidades que ya la han realizado, sobretodo en los aspectos de tramitación.
Las actuaciones se han centrado, en primer lugar, en eliminar los antepechos de fachada y el amianto de las cubiertas.
En la envolvente de los edificios se ha añadido:
- 18 cm de aislamiento con paneles sandwich en las cubiertas
- 8 cm de aislamiento con SATE en las fachadas
- Ventanal comunitario con doble vidrio y rotura de puente térmico
El cambio de ventanas de las viviendas se ha dejado a elección de cada vecino, puesto que algunas ya habían hecho mejoras y otras prefieren hacer esta actuación más adelante.
Otras posibilidades de actuación que se están estudiando para implementar en el futuro son la instalación de paneles fotovoltaicos, aerotermia y geotermia.
Con estas mejoras en la envolvente de los edificios se ha conseguido un aumento de 2 letras en la escala del certificado energético, lo que significa aproximadamente un 58% de emisiones menos a la atmósfera.
Medidas para mejorar los procesos de rehabilitación energética de edificios
Durante la jornada se repitió, varias veces, lo complicados que resultan estos procesos por la falta de apoyo de la administración, el acceso a la información, la tramitación de licencias y ayudas, y la consecuente desconfianza e incertidumbre que genera entre los vecinos embarcarse en este tipo de proyectos.
Desde la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético consideramos que se deberían aplicar una serie de medidas de mejora para facilitar los procesos de rehabilitación energética de edificios y así poder lograr los objetivos planteados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030.
Mayor implicación de la administración: La labor ejemplarizante de la administración es fundamental. Esta se podría desarrollar a través de proyectos pioneros de rehabilitación energética de edificios en su propio parque inmobiliario y en proyectos destinados a edificios residenciales y barrios, dando prioridad a resolver las situaciones de mayor vulnerabilidad para luchar contra la pobreza energética.
Mejorar el acceso y facilitar la tramitación de ayudas: Las subvenciones juegan un papel que debería ser incentivador para este tipo de actuaciones. Cuando la burocracia y la falta de agilidad en la tramitación se hacen complicadas y se alargan en el tiempo, se convierten en un elemento que genera desconfianza en las comunidades de vecinos para decidirse a poner en marcha la rehabilitación energética de sus edificios.
Facilitar la financiación a las comunidades: Salvo casos contados, la mayoría de las comunidades necesitarán recurrir a créditos para poder acometer las obras. Al no tener personalidad jurídica, obtenerlos les resulta complicado. La creación de líneas de financiación específicas para rehabilitación energética en entidades privadas y en ICO deberían estar enfocadas a las características propias de este tipo de proyectos, agilizando los trámites para su obtención y dando condiciones especiales como los créditos blandos.
Información y divulgación: Para dar prioridad a la intervención en la envolvente térmica y que la estrategia a seguir sea, en primer lugar, la reducción de la demanda energética evitando el sobredimensionamiento de las instalaciones térmicas, es necesario que se realice una labor divulgativa desde las administraciones sobre cuál es el desarrollo más adecuado para una rehabilitación energética integral en los edificios existentes.
Implicar a todos los agentes que intervienen de forma directa e indirecta en la rehabilitación energética: Por su cercanía con las comunidades, los administradores de fincas juegan un importante papel, por lo que es necesario que estén informados sobre las novedades en cuanto ayudas, nuevas normativas y se impliquen de forma más estrecha en la gestión de todo el proceso.
Agilizar los trámites para obtener licencias de obra: Los tiempos de espera de hasta 18 meses para conseguir una licencia de obra en la Comunidad de Madrid repercuten muy negativamente en el inicio, gestión y financiación de los proyectos. Las administraciones locales necesitan dotarse de mayores recursos y eficacia, mediante la digitalización, para reducir el tiempo de concesión de las licencias.
Incentivos fiscales y en tasas: Valorar una disminución de impuestos y tasas ( Tasa de licencia, residuos, IVA, ICIO, IBI…) para los proyectos de rehabilitación energética de edificios existentes.
Garantizar la calidad de las obras y por tanto del ahorro energético: Para asegurar los ahorros energéticos previstos será fundamental que se promueva un mayor control en la ejecución de las obras, apoyándonos en sistemas constructivos estandarizados que garanticen la estanqueidad y el aislamiento. Una vez terminada la obra, sería conveniente que cada vez sean más habituales las comprobaciones mediante termografías y ensayos de hermeticidad (blower door).
La actitud de este vecindario ante un problema de seguridad en sus viviendas frente al que la administración les dejó prácticamente solos, es una cruda muestra de la pasividad e indiferencia que podemos llegar a sufrir, pero también es un ejemplo muy valioso de la enorme capacidad de la gente para mejorar su entorno.